La reforma de la Ley de Seguridad pretende acabar con la propia Seguridad Privada. Reaparece el Guarda.
Bajo los insultos y desprecios a los Vigilantes de seguridad, se camufla la verdadera intención de esta reforma. El art.6 de la futura Ley de Seguridad Privada, lejos de luchar contra el intrusismo del Sector; lo ampara, defiende y potencia, dando un nuevo campo de negocio a las empresas de Seguridad y sin control administrativo y policial. La Seguridad Privada, no va a sustituir a la Seguridad pública. La seguridad privada será sustituida por los “auxiliares”, controladores, guarda de seguridad, etc.,- "la seguridad privada estará siempre subordinada a la seguridad pública, los auxiliares no”-. La reforma de la Ley beneficia a las empresas del sector, dejando al margen a los trabajadores de la seguridad privada, sin hacer ningún caso a nuestras reclamaciones y enmiendas presentadas.